Dios es juez
Dios es juez
(Clase para el domingo 1 de marzo del 2020)
Tema: Dios es juez
Pasaje: Salmos 74-76
Objetivo: Que los niños identifiquen que Dios es nuestro juez que nos defiende y ayuda, pero que también está dispuesto a escuchar nuestras dudas por medio de Su Palabra.
Crisis nacional
En el salmo 74 hay una crisis como pueblo. Ya no es un problema individual, sino que todos están metidos en él. A veces nuestros hermanos nos ayudan y apoyan en ciertas dificultades que tenemos, otras veces nuestros papás ¡hasta nuestros amigos!, pero ¿qué pasa cuando el problema es de todos?
Ustedes qué opinan: ¿está bien o está mal cuestionar a Dios por lo que hace? A lo mejor has escuchado a una persona decir que a Dios no se le cuestiona, pero por eso es importante leer la Palabra, porque aquí vemos al salmista acercarse al Señor para preguntarle por qué está actuando de esa manera en su pueblo.
¿Qué pasa cuando NO preguntamos?
Probablemente te ha pasado que en una clase, cuando explican un tema nuevo, no entiendes bien, no preguntas porque te da pena y ese nuevo conocimiento se ve perdido. Esto mismo pasa con el Señor, Él no se ofende porque preguntes, pero cuando no lo hacemos nos alejamos de Él y perdemos la oportunidad de conocerle mejor.
¿Recuerdas a Jesucristo preguntándole a Dios “¿por qué me has abandonado?”(Mc 15:33–34)? ¿Sabes qué tenemos en común con Él? En que somos hijos de Dios, y así como Él tuvo la oportunidad de preguntarle a Dios en un momento de necesidad y confusión, nosotros también lo podemos hacer.
Jesús entiende todo lo que vivimos en esta Tierra porque Él también lo experimentó y no es ajeno a todo lo que sentimos.
En los versículos 12-17 vemos como el salmista deja de ver el problema y comienza a ver a Dios por quien Él es. Cada dificultad, prueba o sufrimiento nos invita a ver el poder, amor y fidelidad de Dios. No importa qué tan grande o chiquito es tu problema ¡aprovéchalo para conocer más de tu Creador!
Dios es juez
Salmo 75
En el primer versículo se repite la palabra “gracias” dos veces, en el Nuevo Testamento Pablo nos invita a estar agradecidos con el Señor todo el tiempo y por todo (Efesios 5:20).
En este salmo ya no hay duda, sin gratitud porque el Señor está cercano, ¿recuerdas que decíamos que al no entender lo que Dios hace y al no preguntar corremos el riesgo de alejarnos? Pero cuando abrimos nuestros ojos nos damos cuenta que ni siquiera se trata de si nosotros nos alejamos o permanecemos, sino en que Él siempre está cerca de nosotros.
En los versículos 2-5 vemos a Dios mismo hablando a su pueblo dando ánimo al recordarle que Él es juez.
En el versículo 8 recordamos que Jesús tomó la copa de la ira de Dios, esto es que murió por nuestros pecados y ahora ya no le tememos por su ira, sino por su poder para perdonarnos a pesar de fallar.
Dios actúa
Salmo 76
Versículos 1-3 Dios quiere darse a conocer por medio de su creación y por medio de su hijo Jesucristo. Jesús nos salva, sin importar cómo son portemos, quiénes seamos o qué hagamos, Cristo nos ha dado la victoria.
Versículos 4-6 muestra la grandeza de nuestro Dios y lo torpe que es el hombre. Solo debemos temerle a Él.
Versículos 7-12 No hay nadie por encima De Dios, Él es digno de alabanza y adoración. Si fijas tu mirada en Él, podrás vivir confiado.
Versículo a memorizar:
Porque el Señor es nuestro guía; el Señor es nuestro gobernante. El Señor es nuestro rey: ¡Él nos salvará!
Isaías 33:22 (NVI)
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