Rompiendo las cadenas del pecado
📍Tema: Rompiendo las cadenas del pecado
📖Pasaje: Isaías 50
✔️Objetivo: Presentar nuestra condición pecaminosa y que nos separa de Dios, cómo Cristo hizo todo para salvarnos y ahora nos toca a nosotros responder
➡️Introducción:
Nosotros no vivimos como esclavos, así como el pueblo de Israel vivía.
Pero si vivimos en un mundo roto, lleno de dificultades y somos esclavos de nuestro pecado, de nuestras malas decisiones.
Hoy encontraremos en este capitulo esperanza de parte de Dios
➡️Clase:
Nuestro estado pecaminoso
Vivimos alejados de Dios.
Una vida pecaminosa.
Buscando siempre hacer el mal.
Rechazando a Dios.
El pecado está en nosotros.
El pecado nos separa de Dios.
Así mismo se encontraba el pueblo de Israel:
Dios dijo:
«Israelitas, cuando vine a buscarlos, no los encontré; cuando los llamé, no me respondieron. Yo no los abandoné, ni los vendí como esclavos para pagar deudas; lo hice por causa de sus pecados. Isaías 50:1-2 (TLA)
Si estamos alejados de Dios, si tenemos consecuencias malas, es a causa de nuestro propio pecado.
Dios no tiene la culpa, ni nos ha abandonado, es más, Él nos llama, aún cuando estamos alejados de Él.
Rebeldía es hacer lo que quiero, cuando quiero, como yo quiero, y esa rebeldía nos separa de Dios.
La respuesta de Cristo
Jesús tiene el poder para salvarnos y recatarnos:
Dios que creó todas las cosas puede hacer que el mar se seque, el cielo se oscurezca, el sol se detenga, abrir los mares, calmar las tormentas.
Así mismo Dios te creó y te conoce mejor que nadie, y ahora Jesús pagó el precio de tus pecados para darte salvación y perdón de todos tus pecados.
Jesús no fue rebelde, fue obediente y cumplió la voluntad de Dios.
Jesús hizo lo que nosotros no hicimos ni podemos hacer.
Jesús buscaba a Dios todas las mañanas, escuchando la voz de Dios.
Sus palabras daban vida, porque hablaba lo que aprendía del Señor.
Pero Jesús fue burlado, humillado, le golpearon sin merecerlo.
Jesús vivió la vida que nosotros debimos haber vivido, sin pecado.
Jesús recibió la muerte y castigo que nosotros debimos haber recibido.
Jesús tomó nuestro lugar y recibió el castigo que nosotros merecemos.
De esta forma venció la muerte y el pecado, resucitando y dándonos vida junto a Él.
Nuestra respuesta
Ahora lo que tenemos que hacer es confiar en Dios.
Obedecer.
Cumplir la voluntad de Dios.
Buscar a Dios cada día.
Confía en Él.
Hacer lo que Dios quiera, cuando Dios quiera, como Dios quiera.
Oír su voz.
Recibir su Espíritu para vivir una nueva vida.
Vivamos para Cristo todos los días de nuestra vida.
Entrega tu vida a Él, como un esclavo de Cristo, pero por amor.
Si quieres cambiar tu vida, no estar alejado de Dios y ser perdonado por tus pecados, entregale tu vida a Jesús en oración, y Él perdonará tus pecados y te dará una vida nueva.
Él te esta llamando, no endurezcas tu corazón, escucha su voz y recibe su amor y su perdón.
➡️Clase para pequeños:
¿Alguna vez te has sentido como si estuvieras lejos de Dios?
A veces, todos nos equivocamos y hacemos cosas que no le gustan a Dios. Es como si nos alejáramos de Él y nos perdiéramos en un camino oscuro.
¿Sabes por qué pasa esto?
La Biblia nos cuenta que todos nacemos con algo llamado pecado, que es como una mancha en nuestro corazón. Esa mancha nos separa de Dios.
Pero, ¡hay una buena noticia!
Dios nos ama mucho y no quiere que estemos perdidos en la oscuridad. Por eso, envió a Jesús, su Hijo, para que nos rescatara.
¿Qué hizo Jesús?
Jesús fue perfecto, nunca hizo nada malo. Él vivió una vida sin pecado, como la que nosotros deberíamos haber vivido. Pero, además, Jesús hizo algo increíble: ¡tomó nuestro lugar! Él recibió el castigo por nuestros pecados, como si fuera un escudo.
¿Y ahora qué?
Ahora, si creemos en Jesús y lo seguimos, la mancha de pecado desaparece y podemos volver a estar cerca de Dios.
¿Qué tenemos que hacer?
Solo tenemos que confiar en Jesús, obedecer sus enseñanzas y amarlo con todo nuestro corazón. Si lo hacemos, tendremos una vida nueva y feliz, ¡junto a Dios!
¿Te gustaría probar?
Puedes empezar hablando con Dios en oración. Dile que quieres seguir a Jesús y que necesitas su ayuda. ¡Él siempre está ahí para escucharte! ¡Él te está llamando hoy!
💡Verso a memorizar:
Y recuerda: si eras un esclavo cuando el Señor te llamó, ahora eres libre en el Señor; y si eras libre cuando el Señor te llamó, ahora eres un esclavo de Cristo.
1 Corintios 7:22 (NTV)
-
Porque el que en el Señor fue llamado siendo esclavo, liberto es del Señor; asimismo el que fue llamado siendo libre, esclavo es de Cristo.
1 Corintios 7:22 (RV60)
Comentarios
Publicar un comentario